Aunque unos más que otros, todos terminamos leyendo algo referente a nuestro signo zodiacal, pero estas en su mayoría suelen ser cosas buenas. Acá te presentaremos cosas que muy probablemente no les guste escuchar a todos, pero si crees en esto, definitivamente deberás considerar este lado oscuro de cada signo zodiacal.
El lado oscuro de Aries
Todos tenemos un lado oscuro, y tú, ARIES, no podías ser una excepción. Tienes muchas cualidades y actitudes dignas del mejor ser de la tierra, pero también sabemos que puedes ser ambicioso como el que más, agresivo, respondón, inquieto, testarudo y obsesionado con muchas cosas que te rodean. En realidad eres una de esas personas que no respetarán jamás a la autoridad, porque para ti, no hay más ley que la que pones tú.
No sueles pensar que todo acto tiene una consecuencia hasta que no ha ocurrido la tragedia. Y si, tienes bastante suerte en eso, casi siempre te salvas de todo. Es muy probable que te prohíban algo (como a todo el mundo), pero tú lo siguiente que harás es ir directo a hacerlo. Así eres. Y así te conocemos.
No eres frágil ni sutil, nadie va a encontrarte sentado en una silla filosofando a cerca de los misterios de la vida, ni quieto en algún sitio por mucho tiempo. A ti, no. Vas dando saltos por el mundo, de aquí para allá, y haciendo siempre lo que te apetece. Lo sabes.
Te despistas con una gran facilidad, puedes empezar a hacer algo con mucha fuerza pero que otra cosa se te cruce en tu camino, y, si ésta última resulta más interesante, no dudarás en abandonar la primera.
Puedes tener algún episodio colérico y estallar de vez en cuando por alguna tontería (que para ti, obvio, es una necesidad vital), como por ejemplo olvidar tus llaves, perder tu teléfono o ser incapaz de abrir una lata de comida cuando tienes hambre (acabarás por golpearla contra todo lo que tengas a mano y si no consigues abrirla, terminarás por arrojarla por la ventana).
Cuando quieres algo vas a por ello sin dudarlo, siempre, pero en el momento en que empiezas a aburrirte, acabas dejándolo a la mitad. No vas a gastar tu tiempo en algo que te cansa y que no te motiva, aunque unas horas antes fuera indispensable en tu vida.
Eres competitivo, te encanta ganar y ser el primero en todo. En realidad, incluso, puede darte envidia (a veces sana y a veces enfermiza) que otros puedan dejarte atrás, pero en el fondo sabes que, tarde o temprano, tendrás otra oportunidad para demostrar que un Aries, cuando se lo propone, llega el primero siempre, aunque eso signifique jugar sucio. ¿El fin justifica los medios? Para ti sí.
El lado oscuro de tauro.
Cuando tu lado oscuro se muestra, TAURO, la terquedad se convierte en uno de tus adjetivos más frecuentes. Si, eres terco a más no poder, arbitrario y cuando quieres conseguir algo, no te frenas, llevándote por delante a quien haga falta. Lo sabes.
Si te pones en el plan arrogante, todos tiran la toalla ante ti. Sinceramente, que Dios ayude a la persona que no hace lo que un Tauro quiere que haga. Tendrá que tener paciencia porque tú, no vas a ceder, de eso estamos seguros. Es más, aunque sepas que pueden tener razón, que incluso puede ser beneficioso o necesario para ti, si ya tomaste una decisión, no vuelves atrás, al menos hasta que los demás se hayan rendido. Entonces ahí, quizás si puedas comentar que a lo mejor se podría mirar desde otro punto de vista…En definitiva, puedes llegar a ser desesperante para muchos.
Cuando no quieres moverte de un sitio en el que estás a gusto, no te levantan ni con una vara, cuando un Tauro se “estabiliza” (aunque sea en el sofá de su casa) no lo mueve nadie.
Te encanta el dinero, quizás más que a otros signos del zodiaco, y si, eres materialista ¿y quién no verdad?, a todo el mundo le gusta tener cosas en su boca, en su plato, en su bolso, en su banco y en su cama.
Odias que la gente te diga que no puedes obtener todo lo que deseas, ¿que tú no puedes? por supuesto que sí, y es más, cuando lo consigues te aferras a ello como si fuera un tesoro que nadie más puede tocar sin tu permiso. Es por eso por lo que te llaman posesivo, pero, en realidad, lo que no entienden los demás es lo que te ha costado conseguirlo, ¿o no?. Sólo un valiente se atrevería a quitarte algo que es tuyo.
Esa ansia de poseer tiene descendientes, y esos descendientes son los celos extremos y el rencor, que a veces se manifiestan con la gente a la que quieres.
Siempre quieres más y te irrita que otras personas puedan tener más cosas que tú. Reconócelo.
Te gusta controlar e intentas que nadie ni nada se escape de tus manos, siempre quieres saber dónde están cada una de las personas que te rodean, qué es lo que tienen pensado hacer y te enfurece que no regresen puntuales al punto donde habíais quedado.
Tu opinión es inamovible casi siempre y los cambios violentos no te gustan para nada. Te agrada la vida que llevas y ¿para qué cambiarla? Siempre es mejor lo malo conocido que lo bueno por conocer.
El lado oscuro de géminis
GÉMINIS, tu lado oscuro es difícil en ocasiones de descubrir porque sabes llevar a cada persona a donde más te interesa, y pocos se dan cuenta de que, posiblemente, tramas algo. Te caracterizas por ser sincero, es cierto pero también sabes que eres un adicto a los rumores y a los chismes. Te encanta obtener información acerca de todo porque sabes que la información es poder y qué mejor que esté en tus manos…Cuando te sientes acorralado por alguien sólo tienes que explicarle que sabes demasiado de él, quizás hasta el punto de poder amargarle la vida y si, sonríes cuando el otro empieza a retroceder en sus actos.
Tienes una mente calculadora e inestable y, eso, unido a tu astucia, hace que ningún plan se te resista.
En un momento de rabia o en algún enfrentamiento con alguien, las primeras palabras que salen de tu boca son acusaciones o inventos. Eres capaz de ser muy venenoso e hiriente aunque lo mejor de ti, para fortuna de otros, es que se te pasa en cinco minutos debido a que tu mente se ha distraído con algo. Prefieres quedar en paz con alguien que guardar rencor y estar enfadado.
No sueles estar satisfecho con lo que tienes, tienes que estar entretenido todo el tiempo porque tu mente se nubla pensando que otros se lo pueden estar pasando mucho mejor que tú o que tienen grandes planes y no estás en la lista de invitados.
Te niegas a crecer, algo muy típico de los Géminis. Vives en una constante etapa de adolescencia y eso, obviamente, también recae en las decisiones que tomas. La madurez, responsabilidad de tus actos y bla bla bla no van contigo.
Eres inestable, inconstante, inmaduro e incorregible, si, además de bastante irresponsable pero tienes gracia, y eso gusta a los demás. En el fondo sabes que sin ti, las fiestas no tienen sentido, que los viajes son aburridos y que pones la chispa a cualquier evento.
El lado oscuro de cáncer
Sabemos que CÁNCER es un signo que se agobia y sufre y se esconde tras su caparazón cuando se siente en peligro, sí, pero ¿qué hay de su lado más oscuro? Ningún signo es ningún santo así que aquí está tu dosis de maldad, chico o chica Cáncer.
Tu planeta es la luna, de ahí viene ese carácter lunático que todos los cangrejos soléis tener. Lo mismo puedes estar riéndote a carcajadas como si no hubiera un mañana que llorando a mares y sumergido en la más profunda depresión. Así eres, variable y con balanceos emocionales bipolares.
En ocasiones, te vuelves gruñón, susceptible y calculador ante la vida, ante las personas y ante ti mismo. Te puede llegar a irritar absolutamente todo. Desconfías de la vida porque tienes miedo al dolor, y prefieres atacar antes de ser atacado, cazar a ser cazado.
Puedes ser la persona más feliz en un instante de tu vida pero en cuanto te ahogas con algún problema, por mínimo que sea, maldices tu presente, te quejas y te vas a las profundidades sin freno. Al rato, cuando has tocado fondo, te recuperas, y, probablemente, todo vuelve a ser normal, como si nada hubiera pasado. Al tiempo, vuelve a ocurrir lo mismo. Así es tu vida, llena de vaivenes con tus estados de ánimo.
A veces, te alegras de las desgracias ajenas, y mucho más cuando les ocurren a tus enemigos. No es justo que todo te pase a ti ¿no?, así que cuando ves que alguien está hundido te acercas a “socorrerlo”.
No se te olvidan las cosas desagradables que han dicho de ti, en la mayoría de veces ni olvidas ni perdonas. Lo sabes. Si en algún momento sale a la luz algo del pasado lo recuerdas como si lo hubieses vivido hace unas horas. Eres capaz de reabrir el asunto porque para ti, nada está cerrado definitivamente.
La gente que te acaba de conocer piensa que eres tímido y reservado pero sólo eres prudente con algunos por miedo a que utilicen información en tu contra.
En muchas ocasiones, eres de los que arriesga sin temor a nada, te lanzas aunque sepas que vas cuesta abajo y sin frenos y no miras a los dos lados antes de saltar y eso a veces pasa factura. Pero, tú, tienes que intentarlo todo. ¿No hay mucho que perder no?
El lado oscuro de Leo.
LEO, ya sabemos que eres leal, orgulloso, valiente, espléndido y magnifico. Sí, pero no te has planteado que probablemente todos los que te adulan de esa manera lo hacen porque tienen miedo a que el Rey del Zodiaco les de una buena puñalada por la espalda. Pues sí.
Sabes de sobra que tienes una actitud arrogante cuando tu lado oscuro se muestra, y también eres vanidoso, autoritario, mandón y contestón, como buen signo de fuego. Amas el drama y todo lo que le rodea. Una infidelidad por parte de cualquiera y armarás el escándalo de su vida. Siempre hay algo que dejas claro a todo el mundo y es que tú eres el que manda.
Te encanta que te adulen y que te digan lo grandioso y admirable que eres, te dejas querer y vas aumentando tu ego poco a poco. Si, eres egocéntrico, ¿hay algún problema? Tú sabes lo que vales y lo que por “derecho” te corresponde, además, una gran parte del mundo gira a tu alrededor y te respetan por lo que llegas a conseguir en tu vida. El problema es que te fías de las personas demasiado rápido y otros signos se aprovechan de eso.
Otra cosa, un Leo cree que jamás comete errores, jamás te equivocas. Eso es así. Por algo eres el Rey del Zodiaco ¿no?
Tu vida sin la gente no tiene sentido y, es más, caes bien. Saben que podrán contar contigo para dar cualquier golpe maestro. Todo lo que sea conseguir más poder, más liderazgo y más autoridad es bienvenido a tu vida.
Piensas a lo grande, actúas a lo grande, por eso, desprecias a la gente mediocre y que se conforma con todo. Jamás serás como ellos, aunque también sabes que los necesitas así (personas que no se quejen ni aspiren a nada) para poder gobernarlos.
Puedes llegar a ser muy cruel con el demás, tirano y con cero tacto. Son pocos los que se atreven a retarte y a provocarte pero los hay. Y tú, no tienes mucha paciencia con ellos. Cuando te has lanzado al cuello de alguien ya no hay quien te frene, así que, un consejo para quienes no son Leo y tienen a alguno cerca: alíate con el si no quieres problemas y si no, NO ESTORBES.
El lado oscuro de virgo.
VIRGO es conocido por decir las cosas como son, sin cortarse, y eso es bueno, un gran atributo, pero también tiene un pequeño lado oscuro que no todos conocen, pero ya estamos nosotros para desvelarlo.
La mayoría de los Virgo son negativos, están obsesionados con los detalles y os encanta juzgar y criticar. Sobre todo, lo último. Sabes que tienes una lengua viperina cuando quieres y además piensas que, no hay nada de malo en la crítica, ya sea constructiva o destructiva. La cuestión es criticar. Punto.
Dices que tienes sentido del humor, y que quizás a veces sobrepasas de alguna manera la línea entre el humor ingenioso y el humor negro, y sí, es cierto, puedes llegar a humillar al máximo a quien quieras con un sólo comentario “gracioso”.
Otra cosa a tener en cuenta si tu lado oscuro se muestra es que no tienes tacto para explicar las cosas, ni tacto, ni buenas formas, ni diplomacia. Para nada. Si te despertaste con el modo “sarcasmo on”, mejor que nadie te pida un consejo porque el resultado será que lo darás, claro que sí, pero a tu manera (es decir, de forma sangrienta) y que alguien acabará llorando a solas después, y no serás tú, evidentemente.
Eres perfeccionista con lo que te interesa a niveles extremos. Las cosas deben de estar en el lugar dónde las colocaste y sabes perfectamente si alguien las ha movido un milímetro de su sitio. No toleras que nadie agarre lo que es tuyo sin permiso y no tardarás en hacer un drama si lo hacen.
La primera impresión, como buen detallista que eres, es imprescindible para ti. Si algo te entra por los ojos en una primera toma de contacto, te entra, si no, tendrá que esforzarse mucho para que le des una segunda oportunidad. Si conocieras al mayor capo de la mafia y te diera una buena sensación, mantendrías hasta la muerte que es una buena persona.
Te asusta la enfermedad y además, te obsesionas demasiado con tu salud, tanto que eres capaz de gastar tu dinero en terapias de medicina alternativas, falsos brujos o modas alimenticias.
En definitiva, en tus días malos, esos días en los que la buena vibra no está de tu lado y sólo está presente tu lado más oscuro eres de los que hieres y huyes, pero siempre te quedas cerca para asegurarte de haber causado el daño deseado.
El lado más oscuro de Libra.
LIBRA, no es oro todo lo que reluce ¿verdad?, si, tú también tienes un lado oscuro, quizás más difícil de apreciar que el del resto por tu constante buena vibra y tu equilibrio y todas esas cosas que ya sabemos. Pero lo tienes. Y es este.
Estás hecho para el ocio, la diversión, la vanidad, la contradicción y la imprudencia en muchas ocasiones. Puedes cambiar de opinión veinte veces en media hora porque nunca tienes nada claro, alguien te ofrece un plan mejor y tus dudas se multiplican por cien. Puedes tener en tu mente que viajarás a Londres en menos de un año pero al final es China y al final es a un pueblo a dos kilómetros de donde vives para obtener conocimientos sobre la medicina cuántica. Así eres tú, ¿Ilógico? ¿Incoherente? Sí, un poco. Y esto es sólo un ejemplo.
No te sacias con nada, cuando has obtenido lo que deseabas, ya no lo quieres, pero nunca aprendes, y lo sabes.
En realidad lo que tú buscas es el “equilibrio” en tu vida, el orden, así que para ti, cualquier deuda que tengan pendiente contigo, tiene que ser pagada, si o si, ya buscarás tú las formas de hacerlo. Puedes parecer inofensivo, sociable y caer bien a medio mundo, y te encanta que lo piensen, aunque tú creas de ellos que son unos mediocres sin futuro, pero jamás lo dirás, porque no quieres herir sentimientos gratuitamente.
Tienes una incapacidad total para tomar decisiones, a veces te da miedo elegir entre dos opciones porque sabes que perderás una de ellas, y ¿Quién sabe si es la buena? ¿O no? ¿Estoy haciendo bien?…y así pueden pasar horas. Puedes llegar a desesperar a mucha gente cuando tienes que escoger, pero es lo que hay, no te gusta renunciar y punto. Pero has aprendido algo, y es que, si dudas demasiado hasta que los demás se irritan a veces consigues ambas cosas. Prefieren darte todo a esperar a que te decidas.
El lado más oscuro de Escorpio.
Tu lado oscuro es probablemente mucho más oscuro que el del resto de los signos, ESCORPIO. Es difícil ver hasta qué punto de retorcido y vengativo puedes llegar a ser porque siempre tendrás algo escondido bajo la manga, que utilizarás probablemente, y nos volverá a dejar sorprendidos. Otra vez.
Estás loco por el poder, aunque no te hayas dado cuenta todavía; eres intenso y despiadado y los demás signos del Zodiaco saben de sobra que nadie se mete contigo. Tu reputación es pesada, la gente sabe que contigo no se puede sobrepasar la línea que tú, previamente has marcado, por supuesto.
Puedes llegar a ser la persona más fría, calculadora y maquiavélica de la faz de la tierra. Tus venganzas siempre se sirven en platos fríos y las disfrutas como el que más. Cuando alguien ha hecho algo que no debería de haber hecho, lo único que haces es mirarlo de forma amenazante, y sólo se encogen y agachan la cabeza. Tienes poder, pero buscas más.
Nada te detiene para conseguir lo que deseas, es así, aunque tuvieras que destruir a la humanidad para ello. No eres débil, para nada y el corazón se te congela en muchas ocasiones.
Sabes manipular, muy bien, tú lo llamas “jugar con la mente”. Y si, eres un experto en eso. Siempre ganas. No ofreces segundas oportunidades, si en algún momento te decepcionan, evitas cualquier contacto.
El poder es tu vida y ¿cómo conseguir ese poder? Hay varias opciones, pero tu favorita: el sexo. Eres el sexo sobre ruedas del Zodiaco. Una noche contigo no se olvida nunca y tú sabes perfectamente cómo utilizarlo. Una vez que han caído en tus garras estarán tan ciegos que podrás hacer lo que quieras con ellos. Y lo sabes. A partir de ahí, si quieres que trabajen para ti, lo harán.
A un Escorpio se le admira, el magnetismo que desprendes es aterrador, atraes lo que quieras hacia ti. Eres capaz de hacer un imperio y destruirlo para demostrar que tú eres el que decides, aunque aparentemente pierdas.
Tus celos son legendarios, no soportas la traición ni la infidelidad, porque eso supone perder, y ese, no es tu lugar. Desconfías de los demás porque sabes hasta que punto pueden ser crueles (como tú) pero a veces, también te engañan, y ahí, estás perdido, darás todo a cambio de nada, y cuando te des cuenta de la estrategia te costará volver a levantarte más que al resto. Pero te levantarás.
El lado oscuro de Capricornio.
Querido CAPRICORNIO, no te salvas de una gran lista de adjetivos cuando tu lado oscuro se muestra, empezando porque puedes llegar a ser mezquino, avaricioso, ambicioso, negativo, frío, rencoroso y pesimista. Sí, esta es tu peor cara.
Tienes demasiada energía y terquedad para convencer a los demás de que tu camino es el correcto y de que deben seguirte. Sabes engañar a la perfección y eres un maestro en aparentar que eres la persona más segura del mundo, aunque no sea así. No te mostrarás débil ante nadie, es más, utilizarás tu cabeza fría antes que tu corazón cálido. Lo haces para protegerte del daño que puedan causarte.
Eres demasiado metódico, exacto, preciso, y no cambias. Odias que sean impuntuales contigo y los tratos a medias. Para ti, no hay matices de grises, o se
hace o no se hace, o te cae mal o te cae bien, o blanco o negro.
Tienes rutinas establecidas en tu vida que no vas a modificar, porque en realidad te va bastante bien, aunque a veces seas preso de la monotonía.
Cuando quieres ser malo, lo eres, pero siempre lo haces de forma que nadie sepa que has sido tú. No te gusta tener enemigos, así que pones las trampas a los demás sin que nadie sepa que fuiste tú, no hay socios, ni compinches ni camaradas cuando actúas. Lo llevas en secreto hasta la muerte. Así, jamás pueden descubrirte, estás limpio y no existe prueba alguna en tu contra.
Aún no hemos hablado de tu orgullo extremo, muy típico en cualquier Capricornio. Si te hieren, están acabados, literalmente. Jamás reconocerás que te has equivocado, puedes fallar, haber elegido mal, pero la palabra equivocación no está en tus registros.
Si te traicionan lo mínimo que harás será devolverla, con comisiones, y muy altas. No puedes quedarte sentado sabiendo que han intentado jugar contigo y olvidarlo, no, porque un Capricornio no olvida nunca, el rencor corre por tus venas así que, los demás tienen que tener cuidado contigo.
Odias las prisas, la gente que hace todo demasiado deprisa, sin rumbo, a los inestables y a los que fantasean con cosas irreales. Esos son los peores. Reconoces a los falsos y te encargas de hacerles la vida un infierno. El que te traiciona, paga. Siempre.
El lado oscuro de Sagitario.
Por más que parezca que tus intenciones son siempre buenas, que cuando te equivocas realmente ha sido sin querer o que nos vendas que lamentas tus errores, también tienes tu lado oscuro, SAGITARIO.
Siempre te sales con la tuya explicando que eres un poco “torpe” haciendo algunos comentarios que realmente se pasan de crueles y que tu falta de tacto es solo porque intentas ser sincero. Pero sabemos que detrás de eso se esconde una persona que no es estúpida y que, realmente, sabe lo que hace y lo que dice.
Eres descarado, insolente, atrevido y te encantan las apuestas. Apostar lo que sea, con quien sea. Como signo de fuego que eres, tienes, como Aries y Leo esa pasión por ganar y llegar el primero siempre. Amas el riesgo, así que cualquier cosa que sea temeraria y violenta es bien recibida en tu vida. Sabes que muchas veces acabas estropeando todo sólo por tu impulsividad, pero has aprendido a fingir que te arrepientes, y si, el resto te cree. Así, sabes que sólo tienes que poner esa carita de gatito de Shrek y decir en voz baja: “lo siento, no fue mi intención” ¡Bingo! La gente confía y comienzas a tramar tu próxima “hazaña”.
Odias las barreras, y por supuesto para ti no existen. Si intentan atarte o prohibirte algo, evidentemente, ni siquiera prestarás atención. Tú te confundes, tú lo arreglas. Es así.
El lado oscuro de Acuario.
ACUARIO es sinónimo de buen rollo, paz, tranquilidad, buen amigo, buen amante y buen confidente, sí, pero también tienes tu lado oscuro y además, no tienes ningún inconveniente en que los demás lo vean.
Eres frío, solitario, distante y bastante excéntrico. En el fondo crees que todos los humanos son inferiores a ti y que ninguno te llega a la suela del zapato, pero jamás te atreverías a decirlo porque tú, ante todo, no vas dando información de lo que piensas gratuitamente. Así que tu pequeño secretito lo guardas con llave para ti.
Eres observador, mucho, muchísimo, no se te escapa ningún gesto, mirada o cualquier intento de ataque encubierto, aunque siempre aparentas que eres el despistado que no se entera de nada. No es así. Tú y yo lo sabemos.
Estás en constante búsqueda de ti mismo, no eres conformista y siempre quieres hacer más y más pero te ahogas a menudo y todo tu mundo se desploma en un momento, aunque te recuperas pronto.
Puedes llegar a ser muy frío y reservado con la familia, y a veces la arrogancia te sale por cada uno de los poros de tu piel. Con los amigos sueles ser una persona noble y amable, entre ellos sabes que eres el admirado y si, todo hay que decirlo, el superior.
Te encanta llamar la atención dentro del mundo en el que vives y sea en la forma que sea, con prendas atrevidas o pidiendo un batido de plátano y a la vez mezclarlo con una ración de atún en salsa mientras todos te miran atónitos, por ejemplo. Eres único y eso, tienes que hacérselo saber a todo el que te rodea.
La rutina o la monotonía no van contigo, no sabes en qué día vives ni en que estación del año estamos sin tener que pararte a pensar unos cinco minutos. Escapas de todos los asuntos aburridos como la boda del primo segundo de tu madre o reuniones de trabajo. Y además ni siquiera te inventas excusas, directamente desapareces del mapa.
Otra de las cosas a tener en cuenta es que no te importa nada la opinión que pueden tener los demás sobre ti. Si, eres frío como el hielo cuando quieres y distante, la gente puede llamarte pasota, bohemio, extravagante, raro, callado y reservado. A ti, sinceramente, te da igual. Lo sabes.
El lado oscuro de Piscis.
PISCIS, los dos peces que nadan en direcciones opuestas. Irremediablemente, eso se aplica a tu vida también y tú, lo sabes.
Eres confuso, contradictorio e incoherente. Por un lado quieres hacer una cosa pero por otro tienes obstáculos que constantemente te frenan. Tienes un instinto que hace que tengas que ayudar al resto, a los que más lo necesitan, a los enfermos…pero en realidad, no lo haces a cambio de nada. Sabes que lo haces porque necesitas que las personas te ofrezcan gratitud eterna. Eres como una especie de Capo, entregas ayuda al que te la pide pero a su vez esa persona estará en deuda contigo, y algún día, cuando tú decidas que la necesitas, tendrá que estar para servirte. Cuando realmente logras ayudar a recuperarse a alguien y comienza a tener una vida de éxito, los celos te invaden y comienzas a provocar heridas en su nueva autoestima “sobrevalorada”.
Tienes poca fuerza de voluntad, así que las decisiones que puedes tomar hoy quizás no sean muy fiables. Si haces cualquier tipo de promesa con alguien lo mejor es que lleve una grabadora porque tú negarás todo lo que habías garantizado unas horas antes. Así es tu lado oscuro.
Tienes cambios de humor extremos, como Cáncer. Puedes empezar algún plan contento y feliz y a los dos minutos renegar de la vida y llorar a mares. Lo que quieres ahora nunca será lo que quieras dentro de un minuto o lo que querías cinco minutos antes. Nadie se atreve a hablarte porque nadie sabe en que humor te despertaste.
A veces parece que vas y vienes sin dirección alguna, perdido por la vida pero tú sabes en el fondo lo que haces y hacia dónde vas, solo que no quieres que se enteren los demás. No confías, es cierto, pero quizás porque crees que los demás pueden parecerse a ti. Y tú puedes llegar a temerte, así que mejor ser precavido.
Eres celoso, aunque a veces te cueste reconocerlo y no soportas la idea de perder lo que quieres, así que también te vuelves posesivo con tus cosas y con tu gente. ¡Ah! Y nunca te sientes culpable porque la culpa siempre es de alguien más.
Via UniRad