Seguro que has hablado alguna vez o has escuchado de esa chica o ese chico y de ese «algo» que parecen tener y que es difícil de explicar.
No se trata de cómo viste, ni tampoco de si ese día se ha maquillado o ha cambiado de look. Y tampoco se trata de que haya perdido unos kilitos. Ese «algo» se llama magnetismo o capacidad de atracción y… Sí, con ello se nace, ¡Pero también se puede entrenar!
Según revela el coach y creador del BrandCoaching, Enrique Jurado, la imagen no es tan decisiva a la hora de generar atracción y convertirnos en personas socialmente agradables e inteligentes.
Estas son las claves para convertirse en un imán para los demás:
1. Conócete a ti mism@.
Qué tipo de lenguaje utilizas para ti, …es un lenguaje crítico o alentador? Pues ese monólogo interior es muy importante y puede observar si estás eligiendo sentirse satisfecha contigo misma o boicoteando el principio de tu bienestar y atractivo.
Nunca debes caer en un falso optimismo, por lo tanto no funciona si te dices lo maravillosa que eres cuando hay cosas y aspectos de tu persona con los que chocas. Una actitud potente y duradera dependerá de tener un concepto positivo de ti, valorar lo que sabes de ti y, sobre todo, ser consciente de cuánto amas eso que conoces de ti. Pues sólo sabiendo cómo te sientes puedes trabajar los pensamientos positivos para eliminar los negativos y cambiar tus emociones.
No es una cuestión puntual o de un día sino de un compromiso con la mejor versión de ti misma.
Así, anímate a hacer un pequeño ejercicio cada mañana, que pasa por levantarse de la cama con confianza, sentir la firmeza del suelo, observar tu interior y analizar lo que está pasando en él: pensamientos, sentimientos, estado físico…ya que transmitimos lo que sentimos.
2. Sé auténtica.
Se honest@ con quien eres, evita mentir sobre ti misma, lo que lleva a eliminar las máscaras emocionales, esa será una actitud básica para mejorar tu atractivo. El experto Domingo Delgado, alerta de la posibilidad de que, en ocasiones, deseemos ser lo que no somos solo para resultar atractivas. «Si esto sucede, estarás copiando a referentes del entorno a través de los cuales crees que puedes ser más feliz, reconocida y deseable.
También Nuria Sánchez Romanos, especialista en educación emocional y creadora del Método NSR apuesta por la necesidad de ser genuina: «No hay nada mejor que ser una misma, nos hace ser libres y sentirnos increíblemente bien».
3. Conecta con todas las partes de ti.
Para la experta Laura Gutiérrez es importante que logremos «reconectar» con los ciclos naturales, la espontaneidad y la simplicidad, esos valores que dan sentido independiemente de las modas pues, en su opinión eso es lo que genera el magnetismo y la elegancia de una mujer atractiva.
Así, aconseja darse la oportunidad de vivir desde tu lado salvaje (atreviéndote a ir más allá de lo conocido), desde tu lado protector (que te cuida en las experiencias más duras y sombrías), tu lado guerrero, que sabe poner límites, tu lado intuitivo y tu lado apasionado.
4. Contrólate
Además de conocernos a nosotros mismos (saber lo que sentimos y con qué actitud afrontamos esos sentimientos), es importante según detalla la coach Nuria Sánchez Romanos, regular nuestras emociones, aprendiendo a tener estrategias para afrontar la tristeza cuando nos sentimos apagadas o la ira cuando nos estresamos.
5. Busca tu estilo
Tus gestos o tu forma de expresarte, tus movimientos, la gestualidad, tu tono de voz, el uso de color, la indumentaria, los complementos y la actitud reflejan, según revela Domingo Delgado, un estilo único. Así, el experto en coach de imagen asegura que tu forma de expresarte tiene un sentido y que para conocerlo necesitas identificar qué motivaciones te ponen en marcha en tu vida y en qué ámbitos de mueves.
Los siete estilos universales son un buen referente para comprender tu proyección externa: natural, clásico, elegante, romántico, seductor, creativo o dramático. «¿Cuál es tu verdadera motivación? ¿Cuál es tu necesidad? . «El punto de partida es estar dispuesto a mirar las necesidades más profundas y a empezar por atraerse una a sí misma.
6. Escucha más y mejor
El coach Enrique Jurado invita a desarrollar la capacidad de escuchar y prestar atención a las otras personas. «Escucha las palabras, pero también la mirada, la respiración, el lenguaje corporal… Esto te permitirá atender las necesidades aparentemente invisibles», revela.
7. Sonríele a la vida
Siempre hay alguna razón para hacerlo. Una actitud positiva te ayuda «reencuadrar» las situaciones negativas. Algo que, según Nuria Sánchez Romanos, se puede entrenar. «Si pensamos que no conseguiremos sentirnos bien, no lo conseguiremos porque las cosas que hagamos irán en esa dirección. Si por el contrario pensamos que sí lo conseguiremos, podemos estar seguras de que así será. Hay que pensar en las soluciones en lugar de en los problemas», explica.
8. Sé agradecida, coherente y generosa
«Gracias» es una palabra abre puertas en el corazón de los demás y en el tuyo. «Sólo el hecho de pronunciar la palabra «gracias» con conciencia genera bienestar (hazlo ahora y compruébalo). Agradece al espejo, a tu familia, a tu pareja, a tu mascota, a tu vecino, a tu compañero de trabajo, a tu jefe… Agradece siempre.
«como te tratas a ti mismo, te tratarán» o «como te ven te tratarán».
9. Tan luchadora y confiada como vulnerable
Tener confianza en ti, en lo que haces, en lo que dices y en lo que eres es perfectamente compatible con confiar en la vida, en el mundo o en la gente. Sé luchadora, pelea por tus sueños y arriesga.
Las personas que arriesgan en la vida se rompen de vez en cuando y eso es bueno, pues también tienen la capacidad de regenerarse, de reinventarse… La vida está para ser vivida y eso conlleva ser vulnerable y decirlo bien alto», destaca Enrique Jurado.
10. Localiza tu arma secreta
Tal como explica Myriam Yébenes, autora del libro «Cómo gustarte y gustar. Mis secretos de belleza», todo el mundo tiene secretos de belleza interior. «Una mirada, un gesto, una sonrisa, la forma de moverse, una buena conversación… ¿Cuál es el tuyo?, Actúa y propón.
Vía: mujerhoy