Toda sociedad crea historias y cuentos, y hay algunos que incluso se transmiten en varios países. Siempre escuchamos estas historias sobre personas a las que le pasan cosas raras, y son tan interesantes que seguimos contándolas una y otra vez. No siempre sabemos cuáles son realmente ciertas o cuáles son leyendas urbanas fuera de la realidad.
1. Despertarse sin un riñón
Existe el miedo para muchos de despertarse un día en una bañera con hielo y un riñón menos en el cuerpo.
Si bien la historia o leyenda existe se volvió aún más real en la India cuando una ley exigió que los donantes fueran familiares de quien recibía el órgano. Eso hizo que el mercado negro proliferara y muchos fueron engañados con promesas laborales. Al llegar a la entrevista eran drogados y operados sin siquiera saberlo. Algunos se despertaban al día siguiente con un riñón menos y ningún trabajo.
2. Encontrarse un muerto bajo el colchón
Se cuenta que ua pareja se registra en un hotel y tienen que soportar un horrible olor en su cuarto durante toda la noche. Llaman a la recepción para quejarse y alguien deduce que el olor se originaba debajo de la cama.
El personal de limpieza quita el colchón de la cama y descubre que la pareja ha estado durmiendo sobre el cuerpo en descomposición de una niña que ha sido metida en el colchón.
Esto realmente paso, en Las Vegas. También en la de Ciudad de Kansas, Atlantic City, NJ y en varias ocasiones en Florida y California y, bueno, digamos que bajo o dentro de una cama en un cuarto de hotel parece ser un destino bastante popular para los recientemente fallecidos.
El closet y bajo la cama son dos de los lugares más populares para esconder cualquier cosa (pornografía), así que no es sorprendente que terminen ahí tantos cadáveres
3. Cabezas que siguen vivas luego de la decapitación
La historia dice que si alguien es decapitado, su cabeza sigue funcionando por unos segundos. Y sin dudas esto es cierto, tal cual vieron muchas veces los franceses al usar la guillotina durante la revolución.
En 1905, el doctor Beaurieux probó el mito en un condenado a muerte, y vio que por 5 o 6 segundos el hombre fue capaz de mover los ojos. Incluso lo llamó varias veces por su nombre y él respondió mirándolo directamente.
4. Enterrado vivo
En la actualidad existen métodos para asegurarse de la muerte real, pero antes pasaba con una regularidad alarmante. En el siglo XIX, William Tebb trato de recopilar todas las situaciones que llevaban al entierro prematuro de fuentes médicas de esos días. Él logró documentar 219 casos de casi-entierro prematuro y una docena de casos en los que la disección o el embalsamiento habían empezado en el cuerpo no muerto.
Si tu ibas al doctor con un resfriado en esos días, el tal vez te hubiera cubierto en sanguijuelas y probablemente te hubiera prescrito heroína para eliminar el resfriado. El único método que tenían para determinar si una persona había muerto era, inclinarse y gritarle en la cara “DESPIERTA!!” una y otra vez. Si no reaccionabas, te enterraban.
La preocupación de ser enterrado vivo en ese entonces era tan real que algo que tenían que tener los adinerados y paranoicos era el “ataúd de seguridad” que permitía a los que estaban dentro del ataúd hacer señales al mundo exterior (usualmente tocando una campana o alzando algún tipo de bandera) para avisar que habían despertado 6 pies bajo tierra.
Lo cierto es que ocurrió muchas veces, sobre todo a finales del siglo XIX. Algunos ataúdes eran abiertos después de años y las evidencias de lucha para sobrevivir eran muy claras. Marcas de arañazos en las paredes y posiciones extrañas del cuerpo indicaban que la persona estaba viva cuando fue enterrada.
5. Cuerpos en Halloween
Se dice que durante la noche de Halloween algunas de las decoraciones no son falsas, sino que realmente son cuerpos colgando de una soga. Esto ocurrió en varios lugares donde las personas deciden suicidarse esa noche, y nadie nota que son cadáveres porque se mezclan entre las decoraciones tenebrosas.
En el pueblo de Fredericksburg, Delaware, una mujer de 42 años, loca o depresiva, se colgó de un árbol cerca de un camino transitado un día de Halloween. El cuerpo quedó colgado ahí hasta el día siguiente y fue vista por muchos testigos antes de que alguien se diera cuenta que no era decoración y finalmente llamaron a la policía.
También en la misma ciudad un adolescente, se ahorcó de verdad, e involuntariamente en un show celebrado en Halloween.
6. Decapitado por un ascensor
Según la leyenda, si eres atrapado por las puertas de un ascensor, seguirá moviéndose y puedes perder extremidades o ser decapitado. En 2003 un doctor en un hospital de Houston fue decapitado por un ascensor. Durante varios días había estado fuera de servicio por arreglos, pero en ese momento el cartel de advertencia faltaba, así que se subió en él. Las puertas se cerraron muy rápido y quedó atrapado, mientras el ascensor seguía subiendo.
7. El agua se vuelve oscura por un cadáver
La leyenda habla de personas que se mudan a una nueva casa, abren las canillas, y notan que el agua es oscura y olorosa. En 2013 eso ocurrió pero en un hotel y el causante fue el cadáver de un estudiante en uno de los tanques.
8. Las culebras maman a las mujeres
César Javier Palacios, geógrafo y escritor, cuenta que habló con una anciana, Irene Chicote, ya centenaria, de un pueblo burgalés (España) Palacios de la Sierra y le contó casi como en un susurro, aún temerosa por el siniestro poder de estos animales a los que temía. Contó de la mujer del molinero:
“que tenía una criatura, y la madre pues se quedaba dormida con ella en la cama. Y que iba la culebra y le mamaba la teta. Y dice que el rabo le ponía al niño, pa que lo chupara y no llorara”.
Tienen un mamar muy suave, tanto que “algunas vacas lo prefieren al de sus terneros y las buscan por los prados”, afirman los pasiegos de Las Machorras.
La historia no es nueva. En un capitel de la iglesia románica de Teza dos serpientes maman los pechos de una mujer. Tiene 900 años, pero con seguridad su escultor también sabía de esta diabólica afición láctea de las culbras. Como Camilio José Cela, quien en su novela Mazurca para dos muertos (1984) señala:
“Dicen que Roquiño es así porque a su madre, por las noches, cuando lo estaba criando, le mamaba las tetas una culebra y el pobre pasó mucha necesidad; no digo que no pero a mí me parece que ya vino parvo al mundo, eso se les suele notar en la mirada”.
En otro pueblo Valverde de Llerena afirman que cuando esto sucede se nota porque se le pone la boca negra al niño. En otros pueblos afirma el investigador Domínguez Moreno que se cree que los granitos de los bebés se producen porque han mamado de unos pechos que previamente fueron libados por una serpiente. Para que tal cosa no ocurra, en la comarca de la Sierra de Gata las madres, antes de la correspondiente tetada, se lava los pezones con un paño impregnado de aguardiente.
En muchos de estos pueblos colocan un plato con leche en la ventana del hogar o junto a la gatera de la puerta para que la serpiente sacie allí su sed y deje tranquilos los pechos femeninos. De hecho, es sabido que aún hoy, en algunos lugares se utiliza la leche como cebo para cazar víboras.
El niño recobraba la salud si la madre, después de rociarlo con agua bendita, recitaba la siguiente plegaria:
Una culebra llegó
y de mil pechos mamó,
pero la Virgen María
mamando la sorprendió.
Por beber de esa leche
yo te condeno
que por el día y por la noche
andes arrastra por el terreno.
y para que así ande
toda la vida,
recemos a Dios un Padrenuestro
y un Avemaría.
Pues amén.
Vía: curiosidades cronicaverde