Si alguna vez has sentido una necesidad obsesiva y no puedes dejar de revisar tu Facebook mientras estás trabajando o haciendo algo productivo, entonces has sufrido de adicción a Facebook.
Un grupo de investigadores de la Universidad de California en Los Ángeles ha publicado un nuevo estudio en Journal of Cognitive Neuroscience donde han encontrado que nuestros cerebros tienen una necesidad construida de socializar, lo que hace a Facebook tan adictivo.
El equipo de neurocientíficos descubrió que incluso en los momentos tranquilos, nuestros cerebros se están preparando para conectarse socialmente con otras personas, anhelándolo. «El cerebro tiene un sistema importante que nos impulsa a ser sociales”, explica Mateo Lieberman, quien dirigió la investigación.
El nuevo estudio se basa en descubrimientos realizados en la década de 1990: que hay regiones del cerebro que se vuelven más activas cuando estamos descansando. Parece que nuestra necesidad innata de interactuar con los demás está en el centro de estas regiones.
Mediante el seguimiento de la actividad cerebral de 21 voluntarios utilizando imágenes de resonancia magnética funcional (fMRI), los investigadores encontraron una relación entre la actividad cerebral en reposo y el mirar imágenes sobre emociones de otras personas. Estos patrones de actividad desaparecieron cuando se le pidió a los participantes pensar en problemas matemáticos.
Parece que durante nuestro tiempo de inactividad, el cerebro activa la corteza prefrontal dorsomedial para prepararse para el compromiso social. Lieberman llama a la corteza prefrontal dorsomedial el «CEO del cerebro social» y también se activa cuando estamos soñando.
«Esta parte del cerebro nos prepara para ver el mundo social en términos de pensamientos, sentimientos y objetivos de otras personas», añade Lieberman. Lo que nos lleva de nuevo a Facebook: parecería que la red social de Mark Zuckerberg está construida para adaptarse a los ritmos naturales del cerebro, lo que puede explicar por qué más de mil millones de personas se han inscrito para usarlo.
«Cuando queremos tomar un descanso del trabajo, la red cerebral que se enciende es la misma red que utilizamos cuando estamos mirando a través de nuestra línea de tiempo de Facebook y vemos lo que nuestros amigos están haciendo», explica Lieberman. «Eso es lo que nuestro cerebro quiere hacer, sobre todo cuando se toma un descanso del trabajo que requiere de otras redes cerebrales”.
Via SMania, ScienceAlert