Siempre dicen que somos los más fuertes del zodiaco, y es muy cierto. Somos muy luchadores, nos gusta conseguir todo lo que deseamos, somos persistentes y perseverantes.
Luchadores por excelencia, la mayor parte de las cosas que tenemos han sido por mucho esfuerzo y valentía.
Muchos creen que no somos nada tímidos, en realidad a la mayoría de nosotros nos cuesta hablar en público, o mostrarnos el alma de la fiesta, pero somos exigentes con nosotros mismos y vencemos nuestros miedos internos para dar lo mejor de nosotros.
Cuando algo no nos agrada, somos muy sinceros, a veces nos pasamos y podemos herir a nuestra pareja, amigo o familiar, pero no nos gusta engañar a nadie, tenemos muy claro el sentido de la justicia y la equidad.
Somos muy familiares, nos preocupamos por el bienestar de los nuestros, los amamos con locura y no queremos que nada le falte a nuestra familia. Las madres y padres de este signo somos protectores con nuestros cachorros.
Un amigo siempre podrá encontrar a un Leo como buen consejero, nunca te fallará, te dirá su opinión con sinceridad, su objetividad te ayudará a darle sentido a tu búsqueda, un amigo Leo no te falla, te es fiel a pesar del paso de los años.
Siempre que exista un Leo en la familia o dentro de tu grupo, todo será más organizado y justo.
El lado oscuro de nosotros los Leo
A veces tanto queremos a los nuestros, que somos celosos y posesivos, nos gusta tener la exclusividad de los nuestros y sentirnos el centro de todo. Nos consideran algo egocéntricos, a veces es cierto, queremos ser felices e importantes para los que nos rodean.
No somos tolerantes con las personas que no opinan como nosotros, a veces nos creemos dueños de la verdad, y eso hace que le demos la contra a quienes se oponen a nosotros.
Cuando algo está mal a veces gritamos mucho, podemos decir palabras que luego podemos arrepentirnos, tenemos un carácter fuerte, pero en el fondo tenemos un corazón de oro.
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Vía: Orginal DebeVerse
